Doctora en Alabama Temporada 1 Las bellas del infierno
HD 7.3942 minutos
Dirigida por Jason Ensler ( Chuck , Kath y Kim ), escrita por Leila Gerstein ( Eli Stone , The O.C. , Gossip Girl ) y producida por Josh Schwartz ( Gossip Girl , The O.C. ), Hart Of Dixie tiene como protagonista a Zoe Hart (Rachel Bilson, The O.C. , Jumper ), una neoyorquina que supera en velocidad del habla a Lorelai Gilmore y que lo tiene todo pensado para triunfar. Tras graduarse como la mejor de su promoción en la escuela de Medicina, Zoe pretende seguir los pasos de su padre y convertirse en cirujana cardiotorácica. Pero como sus sueños se desmoronan, la joven médica decide aceptar una oferta de un extraño para trabajar en su pequeña consulta en Bluebell, Alabama, más famosa por sus helados que por sus hospitales. Zoe aterriza en esta diminuta ciudad costera sólo para adivinar que el doctor que la ha contratado en realidad ha muerto, y que además le ha dejado la mitad del negocio como herencia sin ni siquiera conocerla. Pronto descubre que la hospitalidad del sur de EE UU no es siempre tan buena como la pintan. El otro médico de la ciudad, Brick Breeland, no está nada conforme en compartir su consulta con ella, y a su hija, la guapísima Lemon (Jaime King, Sin City , The Spirit , Pearl Harbor ), se le quita todo el candor y la dulzura nada más conocerla. Los únicos aliados de Zoe son el alcalde de Bluebell, el ex jugador de fútbol americano Lavon Hayes (Cress Williams, Urgencias , Friday Night Lights ), su vecino malote Wade Kinsella (Wilson Bethel, The First Ride of Wyatt Earp , Generation Kill ), y el apuesto abogado George Tucker (Scott Porter, Blake Calamar en The Good Wife y Jason Street en Friday Night Lights ), que además resulta ser el prometido de Lemon. Zoe se siente como pez fuera del agua y está a punto de hacer las maletas para despedirse precipitadamente. Sin embargo, la inesperada visita de su madre snob hace que se decante por una vida más modesta. Allí conocerá una parte de sí misma que no sabía que existía y aprenderá a disfrutar de pequeños placeres a los que no daba importancia.